¿Hay algo mejor que un globo flotando
en el aire, desafiando a la Gravedad? Vale, un montón de cosas. Pero, ¿hay algo
mejor que la cara de un niño viendo cómo el globo se eleva? Ya no tantas, ¿eh?
Pues el responsable de ello es el helio, otro elemento de la tabla periódica.
No mola tanto como el litio porque sus aplicaciones terapéuticas son muy
limitadas (diría nulas si no fuera porque hace que la voz suene mucho más aguda
y eso, por fuerza, tiene que ser bueno para la salud… de los demás), pero es
todavía más pequeñito, así que también se le coge cariño. Y es un gas noble,
que no está mal.
En realidad, es complicado
conseguir que la voz se vuelva aguda después de inhalar helio. Hay que
hacerlo bastante bien (ayuda si sabes fumar, que no es mi caso) y el efecto
dura más bien poco, pero puede ser la forma de pasar un buen rato. ¿Que ya
tenemos una edad para hacer esas cosas? Habla por ti, yo todavía me siento lo
suficientemente joven.
Por cierto, el helio tiene el
punto de ebullición más bajo de todos los elementos, no es inflamable y se
puede usar en globos y dirigibles, en criogenia y como anticongelante. Yo lo
digo por si acaso, que saber estas cosas a veces viene bien.
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