miércoles, 30 de octubre de 2013

The Wise Man's Fear, by Patrick Rofthouse

Tengo que confesar una cosa: me mareo cuando leo en un autobús. Pues muy bien, dirás, ¿y eso a qué viene? Muy sencillo: a que este libro me enganchó tanto que me arriesgué lo suficiente como para continuar con su lectura durante un viaje en bus.

Y es que The Wise Man's Fear engancha mucho. Ya hablé hace tiempo de la primera parte (El nombre del viento, o The Name of the Wind) y lo elogié de principio a fin. Tan sólo comenté en su contra que las circunstancias en que lo leí no eran las mejores y que tal vez puede resultar demasiado largo para según qué personas. La segunda parte, aunque notablemente más larga y, por tanto, menos propensa a atraer a lectores “novatos” es, sin embargo, incluso mejor.

Es cierto que algunos pasajes son más densos y que es incómodo leer un libro con 1400 páginas, pero no puedo negar que disfruté desde el principio. La forma ágil con que Patrick Rofthous narra las peripecias de Kvothe gana puntos en esta segunda parte. El mundo en que transcurre la historia deja de ser desconocido y extraño para convertirse en un lugar casi familiar, del que todos tendríamos mucho que aprender (en concreto, me gustó el sistema de evaluación de la universidad) y, por último, las dos historias paralelas van juntándose poco a poco. Claro que la unión definitiva tendrá lugar, como muy pronto, en el tercer libro – que sigo sin saber si es el último.

Además, el hecho de haberme decidido por la versión original, en inglés, fue todo un acierto. No porque crea que la traducción correspondiente no sea buena, sino por un motivo mucho más básico. Un motivo que, supongo, es frecuente en el gremio en el que me estoy adentrando: el hecho de que, desde la primera página a la última, me han entrado ganas de traducirlo.


Sería una pequeña locura (repito que son 1400 páginas), pero los juegos de palabras, los giros, los nombres e incluso los poemas y canciones constituirían todo un reto. ¿Tendré tiempo de hacerlo en un futuro? Lo dudo, pero me sentiré feliz simplemente si el tercer libro sale pronto y puedo leerlo. No pido mucho.

No hay comentarios:

Publicar un comentario